No tengo otra alternativa

Las políticas públicas en los últimos años están referidas a la lucha contra la pobreza, por los altos índices que esta se refleja en indicadores sociales y económicos en las familias rurales; como son la desnutrición, el desempleo, bajo nivel educativo etc. Sin embargo las políticas públicas y sus estrategias para combatir la pobreza, pareciera que no esta llegando a los más necesitados, o si llega no esta cubriendo las necesidades reales de la población.
Esta situación genera una preocupación al interior de las familias, porque está compuesta por seres vivos que necesitan comer, abrigarse, estudiar y al menos cubrir sus necesidades básicas; porque sino estas deficiencias se verán reflejadas en sus actividades diarias (psicomotrices, pensamientos, generación de ideas. Y cuando ve que no tiene como satisfacerlas puede pensar en recurrir a acciones ilícitas.
Este es el caso de Sapillica, un distrito de la sierra de Piura en extrema pobreza, que durante 5 años contribuyó al deterioro de su gestión política con la serie de revocatorias aplicadas a los alcaldes y regidores; y que las instituciones publicas desde su sector realizaban esfuerzos posibles por sobrevivir frente al caos político y social. Sapillica es un distrito que hasta el 2008 no había llegado ninguna presencia de cooperación internacional u ONGs como ha sucedido en otros distritos rurales de Piura y que de alguna manera vienen contribuyendo a la lucha contra la pobreza, con estrategias de desarrollo interesantes.
La población de Sapillica descubrió en el 2006 que era posible salir de la pobreza haciendo otras actividades a parte de la agricultura y ganadería de subsistencia que llevan, practicando la minería artesanal. Un grupo de campesinos empezaron excavaciones descubriendo que vivían sobre una mina de oro, y que al fin habían encontrado la solucion a sus problemas económicos. La practica de la minería artesanal aun controlada, (hasta el momento 30 socavones), permitió una parte mínima de la población cambie su condición económica, ellos querían dinero y ya lo tenían, y empezaron a invertir en autos, tv, radios, motos, mejora de la vivienda; ninguna persona se le ocurrió invertir en agricultura, ganadería, educación para sus hijos e hijas. Desconozco si estas personas saben o se dan cuenta que practicar la mineria artesanal puede destruir irreversiblemente el ambiente, tampoco se si tienen idea del impacto negativo que puede causar en el valle San Lorenzo cuyo mango y limon son un simbolo en la región Piura y en el Perú. Sin embargo actualmente el Estado acaba de emitir un Decreto que declara zona de reserva natural el distrito de Sapillica y que las prácticas de minería artesanal son ilícitas, lo cual es importante para la gestion de los recursos naturales y la gestion ambiental. La población ha reaccionado con temor frente a esta directiva, pero me pregunto ¿El Estado y las autoridades llegarán con otra alternativa para que los más de 11 mil habitantes de Sapillica salgan de la pobreza?